domingo, 23 de enero de 2011

Para empezar

Para empezar, presentarse.
En breve y en directo puedo decir que soy un clínico algo más que maduro (nací en 1951, me licencíé en 1975) que siempre ha pretendido integrar habilidades y herramientas que fueran coherentes con el objetivo de progresar hacia la mejor práctica clínica posible. Tuve una formación clínica clásica, allá en la década de los 70, un inicio en la especialización médica en un hospital general de tamaño medio pero con voluntad de integración docente y una vocación por la investigación clínica que me llevó a compartir, en segunda línea, pero en contacto directo con la primera, los albores de la epidemiología clínica en España. Posteriormente recibí la valiosímima influencia del pensamiento de Diego Gracia y entendí la importancia de considerar los valores como elementos clave para la toma de decisiones en clínica. Ahora tengo la oportunidad de intentar aplicar esas herramientas en la mejora de la práctica clínica desde la triple perspectiva de la asistencia sanitaria, la docencia universitaria y la investigación traslacional.
Mi intención, hoy, no es más que explorar si este blog puede servir de hoja de ruta personal para ir anotando reflexiones. Ya veremos en el futuro que es lo que da de sí.
Que su contenido gire en torno a la excelencia clínica es una forma de aplicar todo ello a una tarea personal y colectiva que en este momento, además de mi propio medio profesional, se extiende a mi cooperación con un motivante proyecto ligado a una sociedad científica